SLAM Móstoles confía en MoonWalk y MaxMeyer® para digitalizar sus procesos de mezcla de pintura
La excelencia en la reparación de chapa y pintura es una prioridad para Talleres SLAM, grupo empresarial con más de 13 años de experiencia en el sector del automóvil. Actualmente ofrece sus servicios en 4 ubicaciones distribuidas por la Comunidad de Madrid (Majadahonda, Madrid capital, Móstoles y SLAM Express), en las que cuentan con más de 125 profesionales. Para seguir mejorando y optimizando sus procesos, su sede de Móstoles ha apostado por automatizar la mezcla de color con MoonWalkTM y su marca de pintura de confianza, MaxMeyer®.
SLAM Móstoles nació en 2010 como un taller de carrocería, pintura y mecánica con nada menos que tres plantas y más de 3000m2 de superficie. Con el paso de los años, y el incremento de la actividad, el proyecto fue desarrollándose con la apertura de nuevas dependencias en distintos puntos de la Comunidad de Madrid y gracias a la firma de varios acuerdos con compañías aseguradoras. El objetivo de su equipo profesional siempre fue cubrir las necesidades de sus clientes con reparaciones de la máxima calidad, para lo que han contado con el apoyo de la marca de pintura MaxMeyer.
La sede de SLAM Móstoles cuenta con un equipo humano de 25 trabajadores, entre los que se encuentran 4 chapistas-montadores, 8 pintores y 2 mecánicos, así como personal indirecto para entrega y recogida de vehículos, administrativos, de recepción y jefe de taller.
Óscar García, jefe de taller de SLAM Móstoles, confirma la intensa actividad del taller, al que acude todo tipo de clientes, “desde el vehículo utilitario más sencillo a modelos de la alta gama como Ferrari o Aston Martin. Pero para nosotros el objetivo es el mismo: proporcionar una reparación, un acabado, de calidad original. Impecable. Y la mejor atención al cliente, algo que conseguimos de manera sencilla con las soluciones de MaxMeyer, nuestra marca de pintura de confianza”, señala.
Para el desarrollo del área de chapa y pintura, el equipo de SLAM Móstoles cuenta con maquinaria de última tecnología y la máxima cualificación de sus reparadores. En sus instalaciones disponen de amplias zonas con bancadas universales con medidores electrónicos de última tecnología y cabinas de pintura de secado endotérmico para acortar el tiempo de curado de la pintura. Asimismo, cuenta con los equipos necesarios para reparar en cualquier tipo de carrocería, ya sea de acero, aluminio u otro material.
Un taller digitalizado
Comprometidos con ofrecer la mejor experiencia a clientes corporativos y usuarios finales, y con la optimización constante de procesos, Talleres SLAM ha incorporado recientemente la ayuda de MoonWalk, la revolucionaria máquina de mezcla automática de materiales de pintura de MaxMeyer, a su equipamiento. “Un par de meses han sido suficientes para comprobar los primeros resultados de MoonWalk en nuestro taller”, afirma Óscar García, jefe de taller de SLAM Móstoles.
“MoonWalk es un gran avance en el oficio del repintado de carrocería, que apenas se había modernizado. Es todo ventajas. Lo primero es que la limpieza de la sala de mezcla permite mejorar la imagen en el taller. Lo segundo es que el desperdicio de materiales se ha acabado: ya no se malgasta ni una gota de pintura. Moonwalk no mezcla pintura de más, únicamente la necesaria para cada trabajo, por muy pequeña que sea la superficie a repintar”, explica García.
En definitiva, apunta García, “el cambio ha sido muy bueno para Talleres SLAM, porque gracias a MoonWalk se libera de tiempo a los trabajadores, que pueden emplear en otras tareas beneficiosas para conseguir una entrega más rápida para el cliente. Si tardábamos 10 minutos en preparar un color sin MoonWalk, y teníamos 10 coches que entregar, suponía hasta 100 minutos, prácticamente 2 horas que ahora empleamos de otra forma. Ahora, el trabajador puede ser productivo en otras áreas del taller mientras se mezcla el color”.
En esta historia de éxito ha jugado un papel fundamental Pinturas Carman, distribuidor de la marca de pintura MaxMeyer. “Pinturas Carman nos propuso contar con MaxMeyer, y ahora con MoonWalk, en nuestros talleres, y la verdad es que estamos muy contentos con el soporte técnico y logístico que nos ofrece. Además, realizan un gran apoyo cuando tenemos alguna duda con la colorimetría”, explica el jefe de taller.